POEMA

En la montaña, con las rodillas magulladas,sola.

Escuchaba algo,algo,pero ningún ruido calmaba mi soledad.

Tenía miedo,miedo,de que nadie me encontrase.

No veía nada,nada,solo imaginaba que algún día pudiese escapar.

Tumbada en el la hierba, con un viento fortísimo,

y un ojo abierto,veía un rayo de sol, 

pero el reflejo me impedía ver.

Asustada, con la mano en el pecho, esperaba y esperaba,

pero... quizás nadie me encontraba.

Se hizo de noche, en la oscuridad,sola.

La luna brillaba con resplandor,

la ciudad iluminada por las luces. 

Y yo,sola, esperando ansiosa a que por fin, me encontrasen...